domingo, 2 de octubre de 2016

Circulares desde Ansó. Punta el Raso-El Vedau

Tras un mes de septiembre trepidante, parece que llega la normalidad. Entre faenas, trabajo, imprevistos y fiestas tenía el blog abandonado. El primer día de octubre amanecía en Ansó cubierto y lloviendo ligeramente como había dictado la previsión. Ésta también decía que conforme avanzara el día iba a mejorar. Esperé en casa casi hasta las once de la mañana hasta que, aún chispeando, confié en dicha predicción.




Se acerca la XII Marcha Senderista Otoño Valle de Ansó y cada miembro del Club de Montaña Linza aporta algo. Tenía una buena excusa para salir a dar un par de paseos y grabar los tracks de los dos recorridos de la marcha. Aunque era tarde, si no me dormía, llegaba a hacer el recorrido largo antes de comer y dejar el corto para la tarde.

Recorrido largo: Ansó-Borda Cheso-Collada Baja-Punta del Raso-Palomeras-Borda Botero-Espelunga Pabirrio-Borda Techinero-Borda Catalán-Campo Melera-Paco Fuente Alta-Ansó.




Pese a no sufrir de resacas, las recientes fiestas de Ansó han hecho mella en el rendimiento en el monte, y para colmo la sequía había hecho que la Fuente del Raso estuviera seca... ¡vaya!, tendría que racionar la poca agua que había llevado.




Como siempre, la llegada a la Collada Baja resulta gratificante por sus vistas. Es un balcón espectacular donde uno, por narices, tiene que parar para poder contemplar todo. El posterior cordal de la divisoria entre los valles de Ansó y Hecho y que nos lleva primero hasta la Punta del Raso y luego, ya en bajada, hasta las Palomeras, resulta cómodo y entretenido.




Antes de dejar la citada divisoria, justo al enlazar con el GR entre Ansó y Hecho y antes de volver a la vertiente ansotana se puede disfrutar de unas buenas vistas del Valle de Hecho, de la Reclusa y de Siresa.




Ya en bajada hacia Ansó, el trote se aguanta mejor que en la subida y además la gana empieza a dejarse notar y eso también ayuda de cara a casa. 




Los tramos de GR recién repasado resultan muy agradables de recorrer y así, el llaneo desde la Borda Botero, que pasando por la Espelunga Pabirrio, nos acerca hasta las bordas de Techinero y Catalán, se hace en un "pis-pas".



Variante acertada la que ha decidido la directiva del club a la altura de la Borda Catalán que permite una cómoda alternativa al GR pasando por el Campo Melera y que, dando vistas al Barranco de Acharón, me acercaba al Paco de la Fuente Alta y me plantaba casi en la puerta de casa justo a la hora de comer, ... y de buena gana.









Después de reposar un poco la copiosa comida, volví a salir para realizar el recorrido corto.

Recorrido corto: Ansó-Borda Cheso-Pista del Vedau-Espelunga Pabirrio-Borda Techinero-Borda Catalán-Campo Melera-Paco Fuente Alta-Ansó.




Entre el sol, que finalmente se impuso conforme avanzaba el día, y la digestión, la subida continuaba haciéndose cuesta arriba. Esta vez la ventaja era que al llegar a la Borda Cheso tocaba coger la pista del Vedau y llanear hasta enlazar con el GR entre Hecho y Ansó un poco antes de la Espelunga Pabirrio.




La bajada es la misma que la realizada por la mañana. El tópico de que el monte cambia con las luces, aunque hayan pasado pocas horas en un mismo lugar, lo pude comprobar in situ y pasa a ser una realidad palpable.




Un buen inicio de octubre disfrutando de un monte cercano sin necesidad de coger el coche, ...¡que suerte vivir en Ansó!